Si eres de las que nunca tiene muy claro qué prendas de entretiempo son las que no deben faltar en tu armario, no te preocupes, tan solo tendrás que coger papel y lápiz y apuntar unas sencillas ideas:
– Una chaqueta de punto de rayas: te salvará de miles de situaciones en las que gritas: “¿Qué me pongo?”. Combínala con otros estampados como camisas de leopardo, lunares o estampados lisos como azules, rojos, blancos o amarillos.
– Una chaqueta de tweed: es elegante y combina tanto con faldas del mismo tejido como con jeans o shorts.

– Un chaleco gris: Un básico que nunca falla. Con camisetas blancas, jeans blancos, pitillos negros o como en la foto, con palazzo blancos. ¿El toque? con unos salones con tacón.
